Ya es 17 de Noviembre y mi aventura llega a su fin, el 20 montaré en un avión que me llevará hasta Madrid.
Para empezar me gustaría dar las gracias:
Me gustaría dar las gracias a ACOES, y en especial al Padre Patricio, un ejemplo de entrega y constancia. Un verdadero sacerdote y una grandísima persona. Me gustaría mostrar también mi agradecimiento a la gente que forma la Ong y ser durante 2 meses mi familia, siendo un verdadero apoyo desde el primer día.
A la gente que ha abierto su corazón y su casa a un tío como yo, que me ha dado en ocasiones lo que no tiene y hemos compartido tantas cosas y/o momentos. A cada niño que me regaló su sonrisa y a cada persona que me contó su historia.
A la gente que no me entendió o que no me dió oportunidad a conocer, a cada mala cara y a cada mal gesto porque todos ellos me han ayudado a crecer.
A mis padres y hermano, porque sin su apoyo y educación esto no hubiera sido posible. A mi Padre por enseñarme cada día que existe gente increíble en este mundo de locos, a mi madre porque sé, que este sueño que hoy he cumplido era un sueño de los 2 y a mi hermano, porque aparte de hermano y amigo, es mi ejemplo y modelo desde hace muchos años.
A la gente, amigos, compañeros, equipo, familiares… que han seguido el blog o me han mandado correos. Cada mensaje era una gota de oxigeno y en esta aventura sois mas protagonistas de lo que os creéis.
A ti, por permitirme cumplir mi sueño, y darme fuerzas cada día para tirar hacia delante, por estar tan cerca a tantos km de distancia y por demostrarme que estas ahí cada instante.
Y no me podía olvidar de vosotros, mis compañeros de “locura”. Para vosotros no tengo palabras. Habéis sido mi familia durante 2 meses, me habéis visto llorar y reír, habéis compartido 2 meses de vuestra vida de una forma tan intensa y hemos hecho de 4 sueños, uno conjunto. Yo recordaré toda mi vida lo que he vivido y con quien lo he vivido. Esto no hubiera sido tan grande sin cada uno de vosotros, porque cada uno habéis marcado parte de mí.
Honduras y en especial Tegucigalpa serán parte de mi vida para siempre. Cada día lo he intentado vivir y disfrutar al máximo y son muchas las historias, vivencias o momentos que me llevo conmigo.
Desde hace unos cuantos años despertó en mí este sueño de poder ir a algún país a compartir, enseñar y aprender e intercambiar conocimientos y formas de vida. Hoy vuelvo a casa con la alegría de haber luchado por él hasta conseguirlo y haber vivido aquí unos meses increíbles. Son muchos los nombres a los que en esta aventura me gustaría mostrar mi admiración, pero como es muy difícil me gustaría dedicar este texto a todas esas personas Hondureñas y amigos que luchan cada día por hacer una Honduras mejor.
La realidad aquí es dura, una ciudad de contraste con un alto grado de violencia y pobreza, que aun se agravó por un huracán que dio vuelta a la ciudad. A esto podríamos añadir que los altos cargos del país no ayudan mucho por solucionar esta cuestión. Por otra parte, un pueblo de trabajadores que intenta cambiar cada día la situación, unos niños que quieren ser niños, que desean jugar y reír y una gente que valora las cosas y es feliz con lo que tiene.
A nivel personal, esta aventura me ha hecho conocerme más, valorar mucho mas mi vida y a mi gente. La verdad es que ha habido muchas vivencias que me han marcado de por vida, que seguramente habrán cambiado mi forma de valorar las cosas y muchos momentos de felicidad.
Cuando empecé esta aventura, mi mayor miedo era acabar viendo todas estas cosas como algo rutinario y perder el valor que todo eso tenía. Mi mayor deseo ahora es no olvidarme nunca de lo que he vivido aquí, de la gente que he conocido y todos esos momentos que hemos compartido, espero no olvidarme nunca de esta tierra y sentirme un poco hondureño siempre. Espero desde la lejanía poder ayudar en lo que pueda y sobre todo espero volver dentro de un tiempo y ver que todo ha ido a mejor.
Me gustaría despedirme de todos vosotros y dar las gracias por vuestra constancia, esperamos que el blog os haya servido para tener más noticias nuestras y haber vivido esta aventura desde una posición más cercana, pues esta siempre ha sido nuestra única intención.
Nos vemos en breve. Hasta siempre Honduras!!
Para final me gustaría regalaros un texto.
[…] “Si por un instante me olvidaría de que soy una marioneta de trapo y me regalara un trozo de vida, aprovecharía ese tiempo lo más que pudiera. Posiblemente no diría todo lo que pienso, pero en definitiva pensaría todo lo que digo.
Daría valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan.
Dormiría poco, soñaría más, entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos, perdemos sesenta segundos de luz. Andaría cuando los demás se detienen, despertaría cuando los demás duermen.
Si me obsequiaran un trozo de vida, vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol, dejando descubierto, no solamente mi cuerpo, sino mi alma.
A los hombres les probaría cuán equivocados están al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen, sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse.
A un niño le daría alas, pero le dejaría que él solo aprendiese a volar. A los viejos les enseñaría que la muerte no llega con la vejez, sino con el olvido.
Tantas cosas he aprendido de ustedes, los hombres…
He aprendido que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada.
He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño, por primera vez, el dedo de su padre, lo tiene atrapado por siempre.
He aprendido que un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo, cuando ha de ayudarle a levantarse. Son tantas cosas las que he podido aprender de ustedes, pero realmente de mucho no habrán de servir, porque cuando me guarden dentro de esa maleta, infelizmente me estaré muriendo.[…]
HASTA SIEMPRE HONDURAS
Imanol Puñal
